Características de un servicio Cloud Computing

Después de haber comentado recientemente en qué consiste el Cloud Computing, queremos ahondar hoy en el tema hablando de las 5 características más destacables que debe cumplir un servicio para ser considerado “cloud”.

SINCRONIZACIÓN AUTOMÁTICA

Obviamente, cuando apostamos por un servicio Cloud Computing, algo esencial es el que los archivos se sincronicen de manera automática ya que las actualizaciones en tiempo real resultan básicas para que los archivos reflejen los cambios que realizamos en ellos casi en el acto. La realidad es que no todos los servicios que ofrece la nube disponen de esta funcionalidad por lo que podríamos encontrarnos con un problema importante si nos olvidamos de sincronizar los archivos manualmente de cara a un proyecto importante.

Los mejores servicios de almacenamiento en la nube, además de sincronización automática, nos permiten también a los usuarios programar copias de seguridad permanentes en una unidad externa especificando los intervalos de tiempo que deseemos para tal acción.

SEGURIDAD

Una de las principales preocupaciones de una empresa, con razón, se basa en la seguridad proporcionada por un servicio Cloud Computing ya que los datos con los que trabaja son privados y no quieren que se vean comprometidos por un servicio que carezca de las características adecuadas.

Es conveniente, por tanto, elegir un servicio que cuente con encriptado de datos permitiéndonos elegir nuestra propia clave de cifrado; esto podemos complementarlo con diferentes niveles de acceso para cada uno de los empleados que formen parte de nuestra empresa pudiendo, según el trabajo de cada uno, acceder a un tipo de archivos determinados dejando el resto fuera de su alcance.

HERRAMIENTAS DE LIBRE ELECCIÓN Y COLABORATIVAS

Otra de las ventajas que definen al Cloud Computing es la libertad que nos ofrece en todo momento a los internautas para elegir qué aplicaciones queremos usar pudiendo optar entre aquellas que son gratuitas y las que son de pago. En el caso de estas últimas, su coste dependerá siempre de variables como el tipo de servicio contratado, el tiempo que vamos a usarlo, el volumen de tráfico de datos utilizado, etc; también influye si cuentan o no con diversos roles de usuario para los accesos: protección con contraseña, niveles de carpetas y subcarpetas, compartir a través de enlace directo o por correo electrónico.

Al hacer uso de herramientas colaborativas, podremos compartir archivos con aquellos usuarios autorizados en cualquier dispositivo, ordenador de sobremesa, tablet, smartphone, etc.

COSTE ECONÓMICO Y ESCALABILIDAD

Hablamos de escalabilidad como la capacidad de almacenamiento flexible a un precio asequible; es decir, según el servicio que necesitemos y las funcionalidades que tengamos, el coste variará de manera lógica comunicándonos nuestro proveedor la modificación en la tarifa de suscripción. No es lo mismo estar haciendo uso del 25% de una aplicación que el 80% ya que las necesidades de nuestro negocio pueden variar con el tiempo.

EDICIÓN DE ARCHIVOS DESDE LA NUBE

Si bien es cierto que no todos los datos son evitables online (la música, por ejemplo, hay que descargarla en un disco duro) además de compartir archivos, poder verlos y acceder a ellos, un buen servicio Cloud Computing permite editarlos desde la propia plataforma haciendo que estos cambios se sincronicen automáticamente en todos los dispositivos a la vez que posean conexión a internet.

SUPERVISIÓN DEL SERVICIO

Gracias a los sistemas en la nube se pueden controlar y optimizar el uso de los recursos de manera automática por lo que, el uso de los mismos, puede seguirse y notificarse aportando transparencia tanto para el proveedor como para el consumidor del servicio utilizado.

Las características que acabamos de nombrar son algunas de las más importantes a tener en cuenta cuando contratemos un servicio Cloud Computing, tratando de elegir siempre aquél que mejor se adapte al crecimiento de nuestro negocio.

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